Más allá del sacrificio que implica seguir una dieta para bajar de peso, mantener el peso correcto no es un reto menor. El mantenimiento del peso requiere mucho trabajo y es importante saberlo y tomar conciencia de ello, porque muchas personas creen que no requiere ningún tipo de estrategia mantener una pérdida de peso reciente.
Si bien el reto es aprender cómo desarrollar tu disciplina , de tal modo que consigas incorporar las buenas conductas alimenticias como un hábito, podemos aportar desde aquí algunos consejos para asegurarte de poder mantener tu peso estable en el camino, a medida que envejeces.
Las calorías en equilibrio
Mantener el peso es más complicado de lo que parce porque la clave es sostener la proporción de calorías consumidas versus las calorías quemadas. ¿Por qué? El motivo es que hay muchas variables que afectan esta relación, tales como la eficiencia metabólica, el horario de las comidas y el tipo de ejercicio que consigas realizar (aeróbico vs anaeróbico). Asegúrate de tomar en cuenta tus necesidades de energía (para la vida diaria y ejercicio), las necesidades nutricionales, y el régimen de ejercicio. Estos son diferentes para cada persona y varían según la edad, el sexo, el peso, las comorbilidades y nivel de condición física.
Pérdida vs Mantenimiento
Lo primero que recomiendo es no entrar en un estado de “obsesión”. Sé flexible en tu enfoque para el mantenimiento del peso, comenzando por asumir que aquello que funciona para bajar de peso no siempre funciona para el mantenimiento. Si has perdido peso a través de la restricción de calorías y / o mediante la eliminación de los grupos de alimentos, es un hecho que mantener el peso probablemente requerirá diferentes estrategias.
Por ejemplo, es posible que la eliminación de los alimentos fritos y carbohidratos refinados haya producido buenos resultados y fueron estrategias realizables durante la fase de pérdida de peso. Sin embargo, muchas personas no pueden mantener estas restricciones día a día, para el resto de sus vidas. Estrategias de dieta restrictiva de este tipo no contribuyen a mantener el peso y te hacen más vulnerable a la tentación y por tanto al re-aumento de peso.
En concreto trato de decirte que puedes darte un gusto de vez en cuando, es parte de la “recompensa” y satisfacción del logro anterior, pero siempre debes estar alerta y ante el mínimo aumento de peso, equilibrar el balance del que hablábamos en el ítem anterior.