Esta tarta es una delicia, tiene una masa fina y muy suave, el relleno por supuesto es de queso. Para esta ocasión el que usamos es un queso cremoso y lo acompañamos con orégano, un dúo exquisito.
Ingredientes:
- Para la masa:
- 2 tazas de harina
- ½ taza de leche
- 1/3 taza de aceite
- 1 pizca de sal fina
- Almidón de maíz para espolvorear
Para el relleno:
- 300 gramos de queso mantecoso
- ½ cucharada de orégano
- 1 cucharada de aceite de oliva
- 1 huevo batido
- Sal a gusto
Preparación:
- Para la masa, coloca la harina y la sal en un recipiente; mezcla. En otro recipiente -si es posible de metal-, coloca el aceite de oliva con la leche hasta que rompa el hervor. Luego viértelo sobre la harina y mezcla bien. Forma una masa suave y tierna. Deja descansar por unos 10 minutos, luego estira la masa bien fina antes de que se enfríe. Espolvoréala con el almidón de maíz y dóblala, estira y espolvorea nuevamente.
- Repite esta operación varias veces hasta que sea posible. Estira la masa y corta 2 discos de 22 cm de diámetro aproximadamente, depende de la tartera que tengas. Reserva.
Para el relleno, corta el queso en trozos y espolvoréalo con el orégano. Rocía con el aceite y el huevo batido. - Forra un molde con un disco de masa, vuelca la preparación de queso. Coloca el otro disco de masa y une ambas masas en los extremos, haz un repulgo fino, pinta con huevo batido o leche tibia. Lleva a un horno moderado hasta que esté dorada. Retira del horno y deja entibiar antes de cortar.