La anorexia es una enfermedad que cada día afecta a gente más joven. En los últimos años se han multiplicado los niños y adolescentes que sufren este desorden alimenticio. Hoy os damos unos consejos para evitar y detectar este grave problema.
Consejos para prevenir la anorexia
El hogar es el primer lugar donde debemos educar a los niños, por ello es importante que les enseñemos unos hábitos alimenticios adecuados.
Siempre que podamos intentaremos comer en familia y marcaremos unos horarios. Si no es posible comer entresemana juntos por el horario escolar o por el trabajo, al menos debemos estar juntos alrededor de la mesa los fines de semana y durante las cenas.
Debemos procurar que tomen todo tipo de alimentos, reduciendo en lo posible las grasas saturadas y los azúcares innecesarios, pero siempre de una forma natural y evitando que existan alimentos “prohibidos”.
Tenemos que reforzar la autoestima y los valores de los más pequeños para que no se dejen influenciar por modelos determinados a nivel físico que sólo les provocarán ansiedad y complejos innecesarios.
En el caso de los adolescentes pueden comenzar una dieta si fuese estrictamente necesario, pero siempre bajo la supervisión de un médico especializado. De todas formas, lo mejor es que sigan una alimentación adecuada a sus necesidades.
Cuándo consultar al médico
Si en un momento determinado observamos que el niño o adolescente comienza a tener inapetencia y rechazo a ciertos alimentos que siempre le han gustado, o si comienza una dieta sin que sea necesario, debemos hablar para ver qué sucede. Si no conseguimos que nos cuente qué le pasa y observamos que cada vez come menos lo mejor es acudir a un especialista para evitar que el problema empeore.
Debemos asegurarnos de que los adolescentes tomen cinco comidas al día y que no realicen ayunos prolongados, algo muy típico, sobre todo en las chicas, y que puede desencadenar graves problemas de salud.
