El placer de poder disfrutar de una exquisita sopa en estos fríos días de invierno es casi un privilegio si lo complementas mirando nevar a través de un ventanal. Esta receta es de origen alemán, con algunas variantes innovadores queda deliciosa, y al ser tan sustanciosa por los recursos que utilizarás puede ser plato único.

Ingredientes:

• 1 cucharadas de semillas de lino
• 2 cucharadas de polen
• 150 grs de hongos o gírgolas
• 250 grs de champiñoñes
• 100 grs de tomates cherry
• 1 cebolla morada grande
• 2 ramas de apio
• 1 zanahoria pelada
• 1/4 taza de vino blanco
• 2 caldos para diluir de berro y albahaca
• 100 grs de arroz integral
• 1 taza de queso rallado
• 1 pimiento amarillo
• 100 grs de manteca
• 1 diente de ajo

Preparación:

1. Poner los hongos o gírgolas cortados en julianas en tres tazas de agua con sal entrefina a hervir durante treinta minutos, cuando estén a punto, escurrir y guardar el líquido en un bol y cortar los champiñoñes  (separar en una compotera unas dos cucharadas) y la zanahoria en finas rodajas, cortar en cubos la cebolla morada, picar las hojas con las ramas del apio  y tajar el pimiento amarillo. No mezclar los ingredientes a medida que los vas manipulando, colócalos en compoteras para que sus sabores se concentren y solo los olores se encuentren en la cocina.
2. En una cacerola bien caliente derretirla manteca para dorar: el ajo picado, la cebolla y el apio mientras revuelves para que se doren e incorporar de a poco a la elaboración: los champiñoñes, las semillas de lino y polen, el agua donde cocinaste los hongos, el vino blanco, los calditos de berro y albahaca y un litro de agua. Cocinar a fuego suave durante media hora, con la cacerola semicerrada; es decir, que la tapa no cubra toda la superficie sino que deje uno o dos centímetros de abertura.
3. Mientras cocinar el arroz integral en agua con un poco de sal y pimienta; en otro recipiente aparte, durante veinte minutos (serán unos pocos más si compraste el perlado) cuando esté listo, colar e incorporarlo a la sopa con los champiñoñes separados y los tomates cherrys cortados al medio. Terminar la cocción cuando el arroz esté tierno y condimentar a gusto si fuera necesario, servir en compoteras o platos hondos de cerámica para conservar el calor de la sopa.

Sugerencia: La bebida puede ser un sabroso licuado de mandarinas y kiwi.