Hemos visto el uso del chocolate en gran cantidad de platos dulces para postres, para meriendas y para bebidas. En esta ocasión usaremos el chocolate para un plato salado. Seguramente sorprenderemos a nuestro paladar con un sabor bastante diferente. Vale la pena probarlo.
Ingredientes (para cuatro personas):
- 1 pato de un kilo y medio más o menos
- 1 zanahoria
- 2 cebollas
- ½ apio
- 1 ramita de tomillo
- ½ hoja de laurel
- ½ vaso de vino blanco seco
- ¼ litro de caldo (puede ser instantáneo)
- 1 cucharada sopera de cacao
- 20 cl de nata
- sal
- pimienta
Preparación:
- Con el pato ya limpio, que usualmente podemos encontrar en las carnicerías y supermercados, enciende el horno a unos 220 grados.
- Corta en rodajas finas la zanahoria, la cebolla y el apio.
- Unta con mantequilla una fuente para horno y haz un colchón con las legumbres, agrega el tomillo y el laurel.
- Coloca el pato sobre ellas condimenta y llévalo a hornear.
- Aproximadamente a los veinte minutos, las legumbres estarán ya cocidas, retíralas y también retira el jugo que se haya generado, vuelve el pato al horno.
- Prensa las verduras para obtener más jugo y con él rocía el pato por el resto de la cocción.
- Mientras se continúa la cocción, debes desleír el cacao en la nata y deja un momento.
- Cuando el pato esté cocido, cámbialo a una fuente para llevar a la mesa, el próximo paso es levantar el fondo de cocción que te ha quedado en la fuente del horno, para ello toma la fuente y ponla sobre una hornalla, agrégale el vino blanco y raspa un poco el fondo.
- Es conveniente hacerlo con la fuente algo inclinada para un mejor manejo, deja que hierva para que disminuya o reduzca.
- Agrega el caldo y la nata aromatizada con el cacao, deja hervir otro poco hasta que obtengas la mitad del volumen. Pasa esta preparación a una salsera y lleva la mesa junto con el pato.